Ha sido un 2023 relativamente bueno porque pudimos ingresar en obras nuevas de ProCrear en Buenos Aires, lo que implicó un alto volumen de ventas. También es un año especial porque en mayo firmamos un contrato para ser parte de la Red Acindar, que es un hito para nosotros y la región, ya que no había en la costa del Paraná un representante así. Son 80 distribuidores que tienen mejores condiciones y servicios para los clientes. Esto también tiene algunos requisitos que se traducen en inversiones importantes para nosotros. Estamos construyendo un centro de distribución en el Acceso norte de Paraná y lo ampliamos para estar más cómodos y dar un mejor servicio.

Los cambios nos pueden afectar y mucho si se concretan los anuncios previos de parar la obra pública. En realidad, ya hace unos meses se viene frenando porque las redeterminaciones de precios no se daban y se fueron parando obras, principalmente en el sector vial. El anuncio de “no hay plata” está haciendo que las empresas frenen todo y despidan personal. Los corralones también bajaron sus ventas por la pérdida de poder adquisitivo de la gente y la suba que han tenido y van a tener los materiales de construcción.

Como mayoristas nosotros tenemos una estructura más chica y, además, tenemos una zona muy amplia. De igual manera, la idea para el año que viene es sostener el personal y podríamos llegar a tomar algo más de gente con la apertura del nuevo centro de distribución. La gente es uno de nuestro principal capital y tratamos de sostenerla a toda costa.

Las preocupaciones pasan por lo social. Como empresa, trabajamos mucho en acciones sociales, tanto en el Proyecto de Ruta 12, como en el volcadero o en capacitaciones. Hoy estamos armando con los líderes barriales una red de contención porque sabemos que lo que viene es difícil. Hay un montón de otras necesidades, más allá de la comida que atiende el gobierno, que hay que estar atentos. No será sencillo afrontar una recesión y una crisis mayor con estos niveles de pobreza.

Escucho con expectativa que en Entre Ríos se empiece a hablar de austeridad. Nuestra provincia tiene un gasto desproporcionado entre salarios públicos, jubilaciones con privilegios que no tienen las cajas nacionales. Un montón de gastos que son necesarios acomodar. Es un momento donde a nivel nacional y provincial es necesario acomodar porque la realidad los obliga, más que la propia voluntad. No se puede seguir en una fiesta donde no se trabaja, no se produce y no se es eficiente. Sobre todo, comparando con las provincias vecinas.