Andrés Sborovsky, Director del Grupo Dilfer
Grupo Dilfer – Empresa dedicada al retail (Nexon) y servicios financieros (Consumax), con un fuerte enfoque en innovación y adaptación a los cambios del mercado.
BALANCE 2024
PERSPECTIVAS 2025
El 2024 fue mejorando a medida que bajaba la inflación. Fue un año de transición y desafíos para el Grupo Dilfer. Fue un año que terminó siendo aceptable y apenas bueno, no tanto por a dónde nos llevó sino más bien de dónde nos sacó, que era un lugar muy feo.
En el sector financiero (Consumax), la alta inflación, las tasas máximas impuestas por el Banco Central para las tarjetas de crédito y, cuando asume la nueva gestión en Entre Ríos, produce un incremento de la tasa de Ingresos Brutos del 8% al 9% en el medio de una casi hiperinflación. Todo eso complicó el inicio de año que fue mejorando con la baja inflacionaria. Logramos adaptarnos y ver una mejora hacia fin de año. Aunque fue un año difícil, se empieza a vislumbrar una luz al final del túnel.
En el segmento de retail (Nexxon), observamos un cambio en el comportamiento del consumidor, que pasó de un consumo especulativo para protegerse de la inflación a uno más racional o por necesidad real. Esto nos llevó a ajustar márgenes y centrarnos en mejorar procesos internos. Durante el año, trabajamos en optimizar nuestra estructura, reducir costos y desarrollar nuevos productos digitales, adaptados a las necesidades de los clientes y los comercios.
Creo que mientras el presidente siga siendo Milei mi grado de confianza en los cambios es absoluto. Está claro que es una persona que no va a claudicar en sus ideas. Quedó claro también que los gobiernos provinciales y municipales marcaron su estrategia que dudo la vayan a cambiar.
El contexto de apertura de importaciones plantea oportunidades y desafíos. En Nexxon, la flexibilidad para adaptar el mix de productos y los proveedores es clave, especialmente en ciudades fronterizas como Concordia y Colón, donde competimos con precios del exterior. Hoy importamos en forma directa o con otras empresas haciéndolo en conjunto. Nosotros debemos ser los mejores comercializadores de esa mercadería. Y lo que hace un diferencial es la estructura impositiva. A nivel nacional sí vemos a dónde se quiere ir, pero a nivel provincial y local no tanto. Es determinante ajustar los esquemas impositivos a las nuevas realidades comerciales. Hoy, cualquier cliente puede hacer sus compras en USA, China o cualquier lugar del mundo en forma directa sin pagar ingresos brutos a la provincia ni tasas comerciales a los municipios, y las empresas sí. No se puede tapar el sol con las manos y ahí es cuando se entiende que hay que adaptar las estructuras impositivas a las nuevas tecnologías y realidades del mundo.
En cuanto a la tecnología, aunque el uso de inteligencia artificial en la empresa aún es limitado, estamos evaluando su implementación para mejorar procesos. Lo poco que hemos probado ya nos mostró los resultados y a dónde podemos aspirar en el futuro inmediato. A mediano plazo, la inteligencia artificial no será optativa y el que no la adopte quedará fuera. Las herramientas tecnológicas son ahora más accesibles, lo que permite competir incluso con grandes empresas.
Con respecto a inversiones, aunque los proyectos están listos y estudiados, aún no se han ejecutado, ya que esperamos una mayor estabilidad en la economía. Algunas iniciativas, como obras y construcciones serán tercerizadas, mientras que las relacionadas con tecnología también se apoyarán en un ecosistema de proveedores externos.
De cara al 2025, el panorama es optimista. Si esto sigue, continuaremos con los cambios y ajustes, pero ya podremos disfrutar de los primeros cambios y ajustes que ya se hicieron en 2024, como empresa y como sociedad. Puede ser un año de 8, pero en el que deberemos trabajar con mucha intensidad para lograrlo.
La eliminación de la inflación cambiará radicalmente la gestión de nuestros negocios, especialmente en el rubro financiero, donde hará viable el modelo; y en el retail, al reducir los costos del stock. Todavía la gente valora mucho el producto “en el momento”, y eso requiere un stock amplio y disponible, lo que será más sostenible sin inflación. Será un año de oportunidades para capitalizar los ajustes realizados en 2024, consolidar cambios y disfrutar de los beneficios de un entorno más estable. El desafío estará en seguir adaptándonos y manteniendo la calidad del servicio en un mercado que no deja de transformarse.
